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Un sector cercano al tigrense rechaza también un acuerdo con Posse o con Jorge Macri
Por Marcelo Veneranda
El perfil híbrido -ni kirchnerista ni opositor- que Sergio Massa pretende darle al Frente Renovador comenzó a generar chispazos a la hora del armado de las listas. Darío Giustozzi, el intendente de Almirante Brown que suena como posible primer candidato -si no juega el tigrense-, amenazó ayer con dar el portazo si prosperan las conversaciones entre el massismo y los intendentes de Pro Jorge Macri (Vicente López) y Gustavo Posse (San Isidro).
El dato, además, es que ese entendimiento también es resistido por algunos de los más fieles intendentes del massismo. "Que Massa acuerde o sume algún macrista a la lista no sólo es un problema para nosotros: es determinante", fue el mensaje que Giustozzi hizo correr ayer entre sus colaboradores. Una advertencia que tenía planeado dar personalmente, anoche, en dos entrevistas con canales de televisión.
"Macri y Venegas son un límite para nosotros", agregó el funcionario del intendente. No sólo aludía al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, y al líder del sindicato de peones rurales, Gerónimo "Momo" Venegas, sino también a los intendentes Jorge Macri y Posse, que en los últimos días mantuvieron intercambios con Massa y sus operadores.
Macri, Posse y el jefe comunal de Malvinas Argentinas, el peronista Jesús Cariglino, buscaron durante semanas un acuerdo con el diputado Francisco de Narváez, que fracasó estrepitosamente el miércoles de la semana pasada, horas antes del cierre de la presentación de alianzas ante la Justicia.
Rápido de reflejos, Cariglino dio el salto hacia el massismo ese mismo miércoles y ofició de intermediario para un entendimiento entre Posse y Macri con Massa, que pretenden sumar candidatos a la lista del Frente Renovador o, al menos, llegar a algún tipo de acuerdo para proteger sus distritos y a los macristas de otras localidades bonaerenses. "Buscamos un frente con vocación de ganar la elección y que sea un freno al Gobierno", repiten desde el macrismo.
Giustozzi salió a presionar ayer en contra de esas posibilidades. "Cuando nos sentamos a charlar con Massa hablamos de construir un espacio superador, no de aliarnos con los que quieren que le vaya mal a este gobierno. Esto es un punto de fricción importante", insistieron cerca del intendente.
El intendente de Almirante Brown es mencionado por el massismo como primer candidato del Frente Renovador, en caso de que Massa decida no jugar. La fórmula, dijo el jefe comunal de Olavarría, José Eseverri, sería encabezada por Giustozzi, Malena Galmarini de Massa y el diputado Felipe Solá.
El problema con esa fórmula es que Massa, sin ser candidato, debería igual salir a hacer campaña por Giustozzi, un intendente que no sólo no es massista, sino que no deja de identificarse como kirchnerista pese a sus críticas al Gobierno. Se trata, en definitiva, de una sociedad que, todo indica, se replanteará el día después de las elecciones.
La mayoría de los intendentes massistas no sólo prefieren ver al tigrense como candidato (más allá de lo que digan en público), sino que suman otro argumento contra una lista encabezada por Giustozzi. "Si nos va mal, igual Massa será el gran derrotado", repiten.
Con acuerdo de Massa, sin él, o para presionarlo, Giustozzi continuó ayer los trámites para participar de las internas del Frente para la Victoria. Pero no por el Frente Renovador, sino por su cuenta. Ante la junta electoral del FPV solicitó la clave para inscribir los avales que le permitan participar de esa interna. "Siempre dijimos que íbamos a agotar las instancias para ir a las PASO del kirchnerismo. Pero no inscribimos el Frente Renovador ni descartamos ir por fuera", explicaron cerca del intendente. En el massismo dijeron desconocer la jugada.
El intendente de Tigre pasó el día de ayer enfrascado en negociaciones para definir su lista. Una decisión que, pese al congreso del Frente Renovador que se anunció para este jueves, probablemente deba esperar uno o dos días más..
